Este baile es típico del sur de Chile y consiste en zapatear y dar vueltas alrededor de una botella, pasarle por el costado y saltarla con maniobras riesgosas, intentando no golpearla o botarla al suelo. Se baila en parejas o cuartetos, y quien primero golpee la botella, debe pagar una multa o penitencia.
Aunque la melodía puede ser variada, el estribillo así siempre es el mismo: “El costillar es mío me lo quieren quitar; el costillar es mío me lo quieren quitar; qué cuentas tiene nadie con mi costillar…”. Se cree que esta danza es originaria de Chiloé, donde todavía se practica en diversos encuentros sociales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario